De repente llegas a mi y me arropas por completo,
Y mi mente se llena de ti, de lado a lado y para cada momento,
Descubro tu gran candidez, ante un mundo de locura,
Y mi decencia te atrapa y te viste de locura.

Déjame despojarte de tu inocencia vestida de gala,
Con la pureza de mi amor pincelada a pincelada.

Déjame mancharte de mis experiencias,
Y con juegos de amor forjar tu existencia.

Deseo siempre verte, besarte, abrasarte,
Que tú sientas lo mismo en cada una de tus partes.

Podrá haber rayos y centellas
Pero nunca nada que me separe de ella.